Conciencia Eco
La tierra no pertecene al hombre, es el hombre quien pertenece a la tierra. El hombre ha herido a la tierra, sin embargo, la tierra puede vivir sin el hombre, pero el hombre no puede vivir sin la tierra. El hombre ya solo esta marcando su muerte
Tragedia en Japón. Alerta del Planeta.
El resultado final de esta cumbre califica como un 'completo desastre', según asegura el sitio.
Pablo Solón señale todos los temas importantes
- 1 ó 2 grados centigrados de calentamiento;
- Los derechos humanos incluidos gracias a Bolivia;
- Derechos de la naturaleza borrados;
- La Corte de Justicia Climática no se menciona;
- Texto sobre emisiones por los inversores militares no incluido;
- Disminuir emisiones completamente libre;
- Nuevos mercados de carbono incluido;
- Bosques solo valorado como carbono;
- Financiamiento completamente insuficiente;
QUE PASARA EN LA ARGENTINA
Según el informe presentado por la Dirección Nacional de Medio Ambiente (Dinama) de la República Oriental del Uruguay, la fábrica de UPM (ex-Botnia) está cumpliendo con las “Mejores Técnicas Disponibles”. Y establece que las sustancias vertidas están por debajo de los límites permitidos. No obstante, se admitió que la planta también estuvo emitiendo otras sustancias, entre las que se cuenta el mercurio.
El organismo reconoció que en el semestre analizado, la empresa habría volcado al río 74 kilos de mercurio. Asimismo, desde la Dirección se advirtió que como resultado de la bioacumulación, ya se podría estar consumiendo ese mercurio a través del pescado sacado del Río de los Pájaros.
La planta de celulosa UPM utiliza un sistema de blanqueo denominado “libre de cloro elemental” (ECF por sus siglas en inglés). En el blanqueo ECF, las principales sustancias químicas utilizadas son dióxido de cloro (compuesto de cloro), soda cáustica (y/o licor blanco oxidado), peróxido de hidrógeno y ácido sulfúrico. El blanqueo ECF usa dióxido de cloro y sustancias alcalinas para extraer la lignina disuelta y peróxido y oxígeno para reforzar las etapas de extracción. La preparación de los blanqueadores químicos se produce en la propia planta.
Qué le sucede al río
Según el informe de la Dirección de Medio Ambiente en agosto 2009, se dio a conocer que además de las emisiones gaseosas, residuos sólidos y efluentes líquidos, la planta emitió otras sustancias, entre las que se cuenta el mercurio. De acuerdo al estudio, durante el semestre analizado la empresa había volcado al río 74 kilos de mercurio. Es decir, que anualmente descarga 148 kilos de una sustancia muy contaminante.
Dado que no existen estudios en Uruguay que digan qué ocurre con este mercurio liberado al ambiente por UPM, sí se sabe que éste eventualmente se deposita en el suelo y en el agua y una vez allí, los microorganismos lo transforman a metil-mercurio, que se bioacumula en las cadenas alimenticias, incluyendo a los peces.
Según consignó El Argentino, como resultado de la bioacumulación, ya se podría estar consumiendo este mercurio a través del pescado, alimento muy común para las poblaciones que habitan en la cercanía del río Uruguay.
Celulosa, cloro y mercurio
Una de las tantas sustancias preocupantes que emiten las plantas de celulosa es el mercurio, sustancia ampliamente conocida por sus impactos negativos en la salud y en el medioambiente.
El mercurio es un elemento químico que se encuentra en la corteza terrestre. Los seres humanos no pueden crearlo o destruirlo. Es una sustancia tóxica y persistente que cuando se libera al ambiente, eventualmente se deposita en el suelo y en el agua. Una vez allí, los microorganismos lo transforman a metil-mercurio, que se bioacumula en las cadenas alimenticias, por lo que representa un riesgo para la salud humana y el medioambiente.
Una vez que fue liberado al ambiente, se puede transportar a grandes distancias y a menudo aparece en zonas muy alejadas de donde fue inicialmente soltado.
El mercurio puro es un metal líquido. Se encuentra naturalmente en rocas como el carbón mineral. La emisión y la liberación al ambiente puede deberse a varios procesos, siendo uno de estos la producción de cloro.
A principio de noviembre, se publicó un informe donde se detectan preocupantes niveles de mercurio en Pontevedra y Flix, España. De acuerdo al estudio, en ambas ciudades españolas se detectaron niveles muy elevados de mercurio en aire, que superan con creces el límite establecido por la Organización Mundial de la Salud (OMS) para la exposición crónica. También se encontró mercurio en los suelos de las huertas.
Estos resultados vuelven a indicar claramente que la industria del cloro emite mucho más mercurio del que declara oficialmente, poniendo en riesgo la salud de los vecinos.
En la Ría de Pontevedra, en el complejo de Lourizán, tiene su sede la pastera Ence con su planta de celulosa y la fábrica de cloro y otros productos químicos de Elnosa.
A raíz del informe, la empresa Ence emitió un comunicado en el cual aclara que no utiliza mercurio ni cloro en su fábrica de Pontevedra, y respecto al primero de los elementos, subraya que tampoco forma parte del proceso industrial de la empresa.
Al respecto, expone que el cloro empleado al inicio de la actividad fue sustituido inicialmente por el proceso ECF, y posteriormente, a comienzos de los años 90, por agua oxigenada y oxígeno en el proceso de blanqueo de la pasta de celulosa de la factoría pontevedresa de Ence. De esta forma, recalca que su producción de pasta de papel está “totalmente libre de cloro”.
No obstante, en la actualidad la población está expuesta a un metal extremadamente peligroso y bioacumulable, como es el mercurio. La flora y fauna están contaminadas, sin importar si el sistema de blanqueo haya sido cambiado por otro menos contaminante y más moderno como es el ECF o incluso por “totalmente libre de cloro”, como declara la empresa Ence. La contaminación existe y probablemente permanezca por largas décadas, por tratarse de una sustancia que entre sus características tiene la de su no degradación y la bioacumulación.
Una buena para el Amazonas
El gobierno de Brasil informó que la deforestación de la selva amazónica se ha reducido a su nivel más bajo en 22 años.
Según la ministra de Medio Ambiente, Izabella Teixeira, el satélite de imágenes del Instituto Nacional de Investigaciones Espaciales (INPE por su siglas en portugués) muestra una caída del 14% con respecto al año anterior.
"Es la menor deforestación de la historia de la Amazonía, son números fantásticos", comentó Teixeira en un evento junto al presidente Luiz Inácio Lula da Silva en Brasilia.
Sin embargo, las cifras aún están por encima de la previsión oficial inicial, que era de 5.000 kilómetros cuadrados de selva destruida.
Compromiso
El satélite de imágenes del INPE mostró 6.450 kilómetros cuadrados de la Amazonia que fueron deforestados entre agosto de 2009 y julio de 2010, período de las mediciones anuales del gobierno.
Según el comunicado del instituto, el área deforestada es la menor desde 1988 y el margen de error es de 10%.
Estos números representan una tasa superior a los 5.000 kilómetros cuadrados de selva destruida que el gobierno había estimado para este año, que se suma a los años anteriores.
La ministra Teixeira declaró que ese es "el nivel de deforestación más bajo en la historia de la Amazonia y estamos comprometidos a continuar para bajarla aún más".
Brasil alcanzó un pico histórico de tala en 2004, cuando superó los 27.000 kilómetros cuadrados
Aca les traemos un impresionante articulo de msn verde sobre los daños que estaos sufriendo todos.
Los ecosistemas también están sufriendo. El 20% de los arrecifes de coral han sido destruidos en décadas recientes y otro 20% se encuentra seriamente amenazado.
Las estadísticas conciernen a todos, porque somos todos los que acabaremos pagando la cuenta.
El verdadero costo
Por primera vez en la historia se está cuantificando el costo de la degradación de la biodiversidad.
La deforestación agrava el impacto devastador de las inundaciones.
Servicios naturales
La razón por la que el mundo está despertando al costo de la degradación es que hasta ahora, nadie tenía que pagar por ella.
Tanto empresas como individuos operaron durante mucho tiempo con la asunción de que los recursos eran infinitos, pero no lo son. Y sólo cuando se calcula cuánto cuesta protegerlos o reemplazarlos es que queda en claro cuán vitales son para la economía global.
En algunos casos, el vínculo es obvio. Por ejemplo, se requiere agua para los cultivos que nos alimentan. Y los peces proveen un sexto de la proteina consumida por la humanidad.
En otros casos, los nexos no saltan a simple vista. Los arrecifes son una barrera natural que protege a las costas ante tormentas devastadoras, las plantas proveen el material para medicamentos que salvan vidas y los insectos son los encargados de polinizar gran parte de los cultivos más productivos.
Las inundaciones de 1998 en China mataron más de cuatro mil personas, desplazaron a millones y causaron pérdidas estimadas en US$30.000 millones. El gobierno chino reconoció que el corte indiscriminado de árboles en las cinco décadas anteriores había reducido drásticamente la protección contra inundaciones y prohibió la tala en esa zona.
Pero no sólo serán las poblaciones más pobres las que sufrirán. Las empresas serán cada vez más afectadas, teniendo que reemplazar servicios que los ecosistemas tradicionalmente ofrecían sin costo o pagar nuevos impuestos para financiar la preservación del medio ambiente. Y a esto se suma el costo generado por los desastres naturales, cada vez más frecuentes.
costo de la actual degradación de los recursos naturales de la Tierra será pagado por todos, ambientalistas o no.